Baile de máscaras, La noche oscura del alma. (el dulce susurro de las palabras...)
Aunque no había sido invitado a la gran gala del ultimo día del año, El baile de máscaras del caballero dulce perverso, Lo miré desde entre los barrotes de mi ventana. Al acabar la gran gala, recosté mi cansado cuerpo en el catre blanco que me esperaba, pero al cabo de un tiempo, y en medio de esa madrugada, terminaba por vivir la más oscura noche del alma; Un zancudo me había despertado del profundo sueño en el que había caído por la pastilla. Eran las cuatro y pico de la madrugada y desperté con la molestia del zumbido de dos alas frenéticas con su habitual molestia luego de haber escuchado las 4 últimas campanadas de reloj cucú que se había convertido en símbolo del sanatorio. Mis pliegues en las manos habían sido atacados a mansalva por un maldito Zancudo, que al encender la luz revoloteaba embriagado por mi sangre de la que había bebido sin detenerse ni un instante. con doliente vehemencia. Tras muchos almohadazos al aire sin sentido ni puntería, decidí gritar para llamar a la